miércoles, 18 de noviembre de 2009

EL MAYOR ENVENENAMIENTO DE LA HISTORIA


Mas de 20 millones de personas están afectadas por la contaminación del agua con arsénico en Bangla Desh. Es una catástrofe de proporciones comparables a las de Bophal o Chernobil. Ocurre lejos, en Bangla Desh, y ocurre todo los días cuando cualquier habitante del este o del sur de este país asiático bebe un vaso de agua o, lo que es lo mismo, su dosis letal de arsénico. La contaminación de las aguas subterráneas por este metal, de una toxicidad similar a la del plomo, afecta ya a más de 20 millones de personas.
El problema se remonta a casi a 30 años atrás, en aquellos años acudieron a Bangla Desh diversas agencias de ayuda internacional, con UNICEF a la cabeza, con la sana intención de evitar las infecciones que provocaba el consumo de aguas estancadas. El objetivo era reducir el alto índice de mortalidad, sobre todo el infantil, causado por enfermedades como la disentería o el cólera, y para ello se inicio un programa masivo de construcción de pozos artesianos.
El plan tuvo éxito pero a u precio muy alto; los niños salvados sufren horrendas enfermedades de adultos. A partir de 1993 - los efectos del arsénico tardan entre 8 y 14 años en hacerse visibles- se empezó a detectar una altísima concentración de ese metal en el agua, que fue confirmada dos años mas tarde. Luego aparecieron los primeros enfermos. La gente de las aldeas empezaba a presentar manchas negras en la piel, endurecimiento de las palmas de las manos y de los pies, se dispararon los casos de conjuntivitis, bronquitis, diabetes y comenzaron a desarrollar tumores, gangrena e incluso cáncer
Sus efectos son letales. El BIAN estima que una de cada diez muertes que se producen en Bangla Desh se debe al arsénico y la propia ONU calcula que este metal puede ser responsable de la muerte de 20.000 bangladeshies cada año. Y son 70 millones los que viven bajo esta amenaza.

No hay comentarios:

Publicar un comentario